El par vial de la carrera 50 fue testigo del regreso de la tradicional Noche del Río, que se realizó en el marco del Carnaval de Barranquilla, el jueves 16 de febrero.
Durante la celebración de los 15 años del evento, que destaca la música y expresiones culturales provenientes del rio, se rindió homenaje al legado musical del maestro Rafael Cassiani Cassiani, quien falleció hace casi un año.
El evento, tras dos años de ausencia por pandemia, llegó recargado y renovado, pues trajo por primera vez un galardón de reconocimiento a los verdaderos intérpretes de la música netamente tradicional; se trata del trofeo “Coyongo del Río”, que además de reconocer el talento de los artistas presentes en La Noche del Río, rinde homenaje a esta danza de relación que se inspira en el quehacer de los pueblos ribereños de la Región Caribe.
Entre los 10 grupos en tarima que interpretaron sus mejores piezas en honor a la tradición musical del Caribe, estuvo la Fundación Cultural El Chandé de Gamarra, quienes, durante 38 años, han llevado el ritmo viviente del baile cantao, con la tambora y demás instrumentos autóctonos de una región rica en cultura y tradición ancestral.
La Noche del Río inició con un espacio académico “El río vuelve a sonar”, el conversatorio de experiencias musicales que tuvo lugar en el Auditorio Mario Santo Domingo en La Antigua Aduana de Barranquilla. Este conversatorio fue moderado por David Lara Ramos, director del Programa de Comunicación Social de la Universidad de Cartagena, donde Mildreth Pasos, representante de la Fundación Chandé de Gamarra, fue invitada para compartir la experiencia y vivencia de la participación del grupo en las diferentes versiones la Noche del Río.
Hablar sobre la divulgación del legado inmaterial de conocimientos y saberes que, como hacedora cultural, en compañía de todo su grupo se encarga de llevar, fue uno de los componentes más enriquecedores de la Noche del Río como un gran acervo patrimonial y testimonial de las culturas ribereñas del Magdalena.