UN ESTUDIO: INCIDENCIA DEL AZAR EN LA PROPAGACIÓN DEL MOSQUITO DEL DENGUE

       A raíz de la explosión descontrolada de mosquitos transmisores del dengue y la alarmante cantidad de niños infectados, me propuse estudiar la incidencia del azar en la propagación del transmisor con las tapas que los niños del colegio Jorge Eliécer Gaitán dejan en el suelo, tapas que a la vez se convierten en recipientes de agua apropiados para la cría del mosquito.

    Para comenzar, hay que decir que la falta de educación ambiental promedio de nuestra comunidad es alarmante. Las tapas y todo lo que debamos botar se deben echar en una caneca o en el bolso, o en el bolsillo si no hay caneca a la vista. Pero no: en más de 300 años de vida comunitaria morroca no hemos aprendido tan elemental conocimiento. Todo lo tiramos al suelo.

     Recoger las tapas de cualquier frasco que esté en el suelo debe ser un mínimo aporte que debemos hacer para prevenir la proliferación del mosquito que transmite el dengue que mata niños. Quise hacer ese aporte a la campaña, pero antes me propuse investigar la incidencia del azar en la propagación del mosquito a través del agua que se recoge en las tapas. Hice una tabla de tres columnas, en la primera anotaba el consecutivo de tapas que había encontrado, en la segunda las que estaban boca arriba y en la otra las que estaban boca abajo.

      Era importante tener este dato por cuanto no era suficiente con recoger las tapas; se debía saber cuántas de las recogidas estaban propicias para recoger el agua que sería vital para que el mosquito pusiera sus huevos, y cuántas no.

    Una vez realizada la tarea tabulé los datos que me proporcionaron las tapas y estos fueron los resultados: total de tapas recogidas: 23; de ellas, 15 estaban boca arriba, y de éstas, nueve tenían agua: cuna perfecta para la cría del mosquito. Las otras ocho estaban boca abajo, no almacenan agua, por lo que el mosquito no se reproduce.

Como conclusiones del estudio encuentro que:

1.A los morrocos nos falta mucha formación ambiental. Los colegios hacen el trabajo, pero el entorno lo deshace. Por lo tanto, esta formación es más una acción continua, coordinada y de calidad de las autoridades ambientales, de salud, educativas y administrativas.

2. El azar está a favor de la crianza de mosquitos en las tapas, ya que el 65,22% de las que al suelo caen boca arriba, versus el 34,78% que quedan boca abajo.

    Si cada uno de nosotros supiera que la fatalidad de la suerte está a favor de la cría del mosquito, le ganaríamos la batalla a esa fatalidad con el arma de la educación ambiental no arrojando las tapas ni nada al piso.

     Culminado el estudio caí en la cuenta de que las tapas hoy en día son de colores, verdes, amarillas, rojas, azules, moradas, blancas. Se podría, entonces, completar la investigación ampliando la muestra y tabulando también por colores para saber cuál color es el más preponderante de caer boca arriba. Así sabríamos con cual color el azar está aliado para seguir propagando la cría del mosquito que transmite el dengue que produce la muerte de los niños en Aguachica.

    Obviamente es un estudio empírico que alguien con más predisposición investigativa lo podría completar.

PRIMER RECREO: SOS señores de las autoridades civiles y de policía de Aguachica y el Cesar. Los colegios no han terminado de salir de la racha de robos y destrucción de la época de la covid19 como para permitir que los continúen robando y destrozando. Varios colegios han sido blanco de los ladrones en este trimestre del año. Se requiere una política municipal de seguridad preventiva antes que represiva, ya que de nada vale capturar a unos menores de edad por su protección penal especial y si son mayores de edad, porque lo que se les puede demostrar por robo no da para ordenar detención intramural.

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