
El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) reveló el jueves 9 de enero que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de 2024 cerró con un incremento del 5,2%, lo que establece el tope máximo para el aumento de los arriendos en Colombia durante 2025.
Este ajuste, regulado por la Ley 820 de 2003, afecta directamente a los más de 21 millones de colombianos que viven en arriendo, equivalentes al 40,3% de los hogares del país, según datos oficiales.
De acuerdo con la normativa vigente, los arrendadores podrán incrementar el canon de arrendamiento hasta un máximo del 5,2%, pero únicamente al momento de renovar el contrato de alquiler. Esto significa que los propietarios deberán esperar a que se cumpla el año de vigencia del contrato para aplicar el aumento.
Por ejemplo, si un inquilino paga actualmente $1.000.000 mensuales, el nuevo valor del arriendo sería de $1.052.000, lo que representa un incremento de $52.000.
El aumento del IPC no solo afecta los costos de los arriendos, sino que también repercute en otros aspectos esenciales del presupuesto familiar, como los alimentos, el transporte y los servicios básicos.
Según el Dane, estos rubros concentran los mayores gastos de los hogares colombianos, lo que refleja un panorama de ajuste económico para millones de ciudadanos.